domingo, 6 de mayo de 2012

Aguardente de zimbro, que no ginebra


Producto de la Beira Interior, el aguardente de zimbro tiene color meloso y aroma análogo a la ginebra.
Se hace partiendo de un aguardiente de orujo, aguardente de bagaço o bagaceira, al que luego se le añaden bayas de Juniperus communis, junípero, enebro, zimbro, probablemente habrá alguna esencia que algunos puedan usar de atajo.
El sabor parecido al de la ginebra le viene, como a aquélla, del enebro. ¿Cuál es la diferencia entre aguardente de zimbro y ginebra?

Mientras que el aguardiente de orujo se obtiene de la destilación de los restos de palillos y hollejos de uva después de fermentados, el aguardiente para la ginebra es un destilado de maltas fermentadas de cereales. En ambos casos se añaden las bayas a los respectivos aguardientes, pero en el aguardente de zimbro se producirá una mera maceración por la que el aguardiente extraerá aromas y color de las bayas, mientras que en la ginebra se volverá a destilar el preparado, que quedará incoloro.

2 comentarios:

  1. ¿No te asombra la primera mente pensante a la que se le ocurrió ponerse a destilar enebro o cebada para conseguir un licor? ¿Lo haría con la idea preconcebida de conseguir ya una bebida alcohólica o fue uno de esos fiascos que terminan convirtiéndose en un gran logro?

    ResponderEliminar
  2. Sí, Rebeca, me asombran esas cosas; supongo que las primeras fermentaciones para dar cervezas y vinos se deberían a accidentes de conservación, después de la prueba vendrían los intentos de reproducción por algún individuo observador. Las destilaciones rudimentarias pudieron hacerse también por accidente mientras se calentaba una cerveza o vino, al condensar parte del evaporado sobre una tapa más fría; la cuestión es que ya se hablaba de esencias y preparados obtenidos por alguna rudimentaria destilación, por ejemplo, en el Egipto anterior a la era cristiana. He leído que las cervezas que tomaban los germanos de los tiempos de Julio César sólo las podía tomar un bárbaro: unas gachas semilíquidas alcohólicas y agrias. Los romanos decían, bárbaros, ¡habiendo vino!

    ResponderEliminar